En esta entrada estaremos compartiendo algunos datos estadísticos que nos permite iVoox y que reflejan el desarrollo del Pódcast en este tiempo que llevamos adelante Pagina en Blanco.
Estamos cerca de llegar al episodio 100. Y es cuando queremos dar fin a esta aventura que inició con las primeras noticias de la pandemia del COVID-19, allá por fines de marzo o inicio de abril del 2020.
Los datos nos indican que el Pódcast funcionó bien durante un par de años, y que al final del mismo decayó, más o menos cuando los episodios comenzaron a espaciarse en el tiempo, lo que coincidió con mayor carga horaria laboral personal y que me impidió trabajar más tiempo con el Pódcast.
Todo ello me lleva a pensar que estuvo bien la decisión de dejar de emitir tras el episodio 100.
Cabe recordar algunos datos interesantes
Desde el inicio del programa hasta la fecha (28/03/2023), que se subieron 88 episodios, la audiencia fue interesante, con oyentes en varios países y con un total de 18.200 escuchas, en el conjunto de episodios subidos. Con buenos promedios en los dos primeros años de emisión. Más abajo comparto los datos estadísticos proporcionados por iVoox y gracias a la IAB (Interactive Advertising Bureau).
Los países donde se escucharon los episodios de Página en Blanco fueron, principalmente, Bélgica y EEUU, aunque también hubo escuchas en números interesantes en España, México, Argentina, Colombia y Uruguay; en menor cantidad también se escucharon episodios en Bulgaria, Reino Unido, Japón, Paraguay, Rusia, Ecuador, Panamá, Chile, Perú, Israel y Noruega)
A fines de 2021 (Noviembre) teníamos un total de 12.812 escuchas en total, es decir, desde abril de 2020. Lo pueden ver en la entrada del 27/11/2021
Y en la entrada del 23/12/2021 proporcionamos algunos datos más de ese año. Habían escuchado los episodios 9.984 veces durante el año. Algo que celebramos quienes hacemos este Pódcast.
Los datos estadísticos nos indican que la audiencia decayó significativamente a partir de febrero de 2022, aproximadamente. Sin embargo, continuamos realizando este programa con mucho placer. Y los datos se fueron proporcionando en la medida de lo posible. Hubo un momento en que iVoox dejó de brindar esa información y ello nos impedía seguir brindando la información en este blog. Es decir, obtener los datos tenía un costo para quienes hacemos el programa. Por lo que optamos por avisar de que no se brindaría, ya que todo esto se hace sin obtener nada monetario a cambio.
Sin embargo, a pesar de lo más arriba mencionado, es inmensa la alegría de llevar adelante este espacio de comunicación, como enorme la cantidad de personas que hemos conocido, en lo particular yo (Walter Rotela), que soy quién interactúa con los escritores y parte del público.
He recibido el afecto y los libros de varios autores en todo este interesante camino. Así también hemos mantenido riquísimas conversaciones con varios autores a lo largo de estos años. Con algunos pude contactarme personalmente, y con otros, la comunicación se mantuvo por los medios electrónicos que nos sirvieron para generar las entrevistas. Más allá de eso supuso también el contacto con entidades que desarrollan eventos como feria de libros y con responsables de programas de comunicación y con gestores de cultura de varias índoles.
Se acerca el número 100
Aún falta... para llegar al cien, pero ése será el último de este Pódcast. Y venimos bien, aunque en marcha lenta. Sin apuro, y con muchas ganas, como de costumbre. En estos últimos tiempos sumamos plataformas donde se retransmite Pagina en Blanco. Sí, a iVoox se sumó, casi desde un principio Spotify. Luego pudimos salir también por Tune In, para continuar después con Podvine y Google Podcasts. También YouTube, aunque con episodios atrasados, siempre, por el tiempo que implica realizar los videos.
Y este blog en el que se lee esta entrada se creó al cumplirse los 6 meses de emisión. Primeramente, el Pódcast Página en Blanco, tuvo un espacio en el blog Nuestras Huellas en la Era Digital. Y se creó también un Pódcast vinculado a Página en Blanco, donde compartimos textos de escritores leídos por ellos mismos: es el Pódcast La voz del autor; el cual se transmite por las mismas plataformas que Página en Blanco, y tiene también su propio blog asociado.
En fin, muchas cosas interesantes se gestaron a partir de marzo/abril de 2020 en relación con estos espacios de comunicación donde la escritura, la lectura, la entrevista, escritores y libros se dieron cita para generar un contenido que se difundió cuidando aquellos detalles que nos fueron posible manejar. Por respeto a los autores como por respeto a la audiencia, hacia la cual iba dirigida esta comunicación, este mensaje en forma de Pódcast se buscó que tuviera cierta calidad en sonido, como en presentación, en el manejo de tiempos de realización y de emisión, y en cuanto a calidad total del producto ofrecido .
Con cada episodio fuimos creciendo, buscando mejorar, aprender, reorganizar y adaptarnos a lo que veíamos era posible generar. Porque se crea algo y se va dando forma con el transcurso del tiempo. La escuela te enseña algunas cosas, el resto lo vas gestando con el trabajo diario, con la mirada atenta y con un sueño que te impulse a seguir, con la búsqueda permanente de nuevos enfoques, de utilización de técnicas posibles y tecnología que esté al alcance. Sí, porque se puede lograr un mejor producto que el que se presenta, basta buscar mejores equipos electrónicos, más inversión y un equipo humano de trabajo que respalde.
A pesar de lo antes dicho, estamos y estoy, en lo personal, muy contento con la experiencia de hacer esta radio a la carta. Un sueño, que se convirtió en una realidad, en una “sustancia” enriquecedora, por donde se lo mire. Apelo al término sustancia en tanto y en cuanto “cosa que tiene valor en sí misma”. Porque así lo defino a este Pódcast Página en Blanco, una cosa que tiene valor en sí misma. Cada episodio nos entrega una entrevista, un dato sobre libros, sobre autores, sobre el acto de escribir… Y lo digo no porque sea responsable del mismo, sino porque si escuchan los episodios encontrarán, estoy seguro, siempre algo interesante que rescatar. Porque me consta, que cada escritor entrevistado lo hizo con suma amabilidad, entregando todo su ser a responder cuestiones que fuimos planteando en cada episodio. Y por ello mi agradecimiento a cada uno de ellos, escritores y escritoras, poetas y poetizas.
Tiempo de agradecer
Decir gracias parece simple, pero no siempre se escucha, no siempre se lee. Y mi gratitud es para cada una de las personas que acercó un dato para una entrevista, para cada persona que se tomó el trabajo de compartir una entrada, un enlace en redes sociales, para cada persona que le dio un “me gusta”, para cada una de las que dejó un mensaje, una salutación, una palabra de aliento. A todas y cada una de ellas GRACIAS. Son muchas las personas que colaboraron en estos años para que este sueño se volviera realidad.
Con algunos compartimos quizás un mate u otra bebida, con la mayoría tiempo de contacto por medios digitales. Y con otros una charla, mano a mano, en algún encuentro personal.
Hay quienes colaboraron no con entrevistas ni nada de eso, sino con su música, con sus talentos. Y en respectivos sitios de este blog los mencioné en su oportunidad. Igualmente, a ellos, a ustedes, gracias.
Hubo gente que colaboró con datos sobre medios, tecnologías, con informaciones útiles de toda índole. Hay quienes colaboraron con su voz. Anónimos no, pero sería larga la lista de intentar nombrar a todos, pues siempre hay personas dispuestas a colaborar. Eso es lo que me enseñó, entre tantas, el hacer esta radio a la carta: la generosidad de las personas.
Algunos datos no medibles
En más de una oportunidad llegué a emocionarme en medio de una entrevista, por lo que relataban los autores. En varias ocasiones nos reímos juntos, porque surgieron anécdotas risueñas, pero en otras, la emoción fue dura, impactante, quizás dolorosa, por la realidad que viven algunos escritores o poetas, por las emociones que los llevaron a escribir algún texto que se compartió en medio de la entrevista o no. Y esas cosas no tienen precio, no tienen medida, no importa medir, sino “sentir”. Y allí reside, creo, la gran riqueza que veo en esta producción de radio a la carta. Moviliza un montón de cosas interesantes, siendo que, la comunicación fue mediada y las distancias eran geográficamente enormes, y sin embargo, desaparecían en ese encuentro singular por medio de la entrevista.
¿Habrá algo más después? Esa es una buena pregunta. Veremos qué se nos ocurre, qué nos proponemos, qué sugieren ustedes, qué propongo yo, qué caminos surgen por recorrer...
Los datos en gráficas
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